Jujuy presentó sus vinos en Mendoza y El Descorche Diario dialogó en exclusiva con su ministro de Cultura y Turismo, Federico Posadas, y su secretaria de Vitivinicultura, Verónica Sato. Ambos contaron acerca del crecimiento vitivinícola de la provincia, los proyectos en materia de producción y Turismo y sobre las características de sus vinos de altura.
A principios de marzo, en el marco de las celebraciones del calendario vendimial, una delegación de Jujuy encabezada por su gobernador, Gerardo Morales, presentó en sociedad sus proyectos vitivinícolas. Se trata de 15 bodegas ubicadas en las zonas de los Valles Templados y la Quebrada de Humahuaca. Una industria incipiente en la norteña provincia pero que decide salir al ruedo y decir, “¡acá estamos!” Son vinos de altura con características particulares que prometen aportar notas distintivas a la diversa y rica paleta de colores y sabores del vino argentino.
Desde el ministerio de Cultura y Turismo, aseguran que en pocos años se han cuadruplicado las hectáreas cultivadas con viñedos y que sin dudas es una industria que se ha sumado al crecimiento turístico de Jujuy. Federico Posadas, el ministro a cargo de esta cartera, aseguró que a pesar del daño ocasionado por la pandemia, Jujuy no ha dejado de crecer en materia turística. “A toda la belleza natural, hoy le sumamos propuestas gastronómicas acompañadas por nuestros propios vinos”, expresó.
Por su parte, Verónica Sato, secretaria de Vitivinicultura de Jujuy explicó; “tenemos la particularidad de tener un clima y una topografía muy extremos, lo cual le confiere a los vinos jujeños características distintivas. Son vinos de altura y de extrema altura, contamos con producciones de vinos hasta de 3.700 metros”.
A lo que el ministro, agregó: “Venimos creciendo mucho de la mano de la vitivinicultura. Hemos pasado de 19 hectáreas, con tres o cuatro bodegas de pocas hectáreas, a más de 15 bodegas, también de pequeña escala, pero ya son 85 hectáreas cultivadas: 20 % de los vinos están en la zona de los valles y el 80 % en la quebrada. Nuestros vinos tienen particularidades muy puntuales con respecto al sol, la tierra, la amplitud térmica; lo que hace que sean vinos con mucha personalidad”.
Por otro lado, la secretaria de Vitivinicultura Verónica Sato, reconoció que; “con respecto a la producción, el mayor obstáculo siempre y se repite en todas las regiones, es el tema del agua”.
“Para todas las producciones es lo mismo y nosotros no estamos exentos de eso. Tenemos climas muy extremos con topografías muy difíciles con lo cual tenemos que eficientizar al máximo el recurso hídrico. Es un gran desafío la incorporación de tecnología para alcanzar esa eficiencia en el uso de agua y tal vez, también poder llevar viñedos a lugares donde hoy en día no podríamos por falta de agua. Como dicen los agrónomos; “la agronomía es el arte de lo posible”, y con tecnología y recursos se puede, y nosotros vamos a trabajar para que eso se pueda realizar”, aseguró.
Jujuy y sus vinos en pocas preguntas
Federico Posadas, Ministro de Cultura y Turismo.
– Ministro, ¿cuáles son los planes a partir de ahora?
– Nuestro objetivo es vincular a la vitivinicultura con el turismo. En Jujuy, el Enoturismo está creciendo mucho porque cada bodega está al pie del cerro multicolores, muchas ya están abriendo sus restaurantes y posadas. Creemos que está todo por hacer. Ya tenemos un “mini circuito” de ruta del vino jujeña.
El hecho que hayamos cuadruplicado nuestra producción en los últimos cinco años demuestra que no solo se hacen buenos vinos sino también, que hay muchas ganas por parte de los jujeños de seguir apostando a esta industria. Estamos trabajando para cambiar la matriz productiva. Antes eran montañas peladas, que no tenían nada y ahora se ve un paisaje hermoso de los cerros multicolores combinados con las viñas.
– De alguna manera, la vitivinicultura y el Enoturismo vienen a sumarse a todos los atractivos que tiene Jujuy en materia de turismo.
– Jujuy está creciendo mucho de la mano del Turismo. Siempre fue una provincia maravillosa, hermosa, con un potencial increíble pero había que terminar de sacarle brillo. Hemos pasado de 900 mil turistas a un millón y medio en los últimos cuatro años, producto de la paz social, porque antes era complicado llegar a Jujuy con los cortes de rutas y el enorme conflicto político.
De la mano del gobernador Morales, hemos logrado unir a todos los jujeños y empujar todos para el mismo lado. Esto, nos ayuda mucho para promocionar el destino, para romper la estacionalidad, que era el otro objetivo. Hemos tenido un enero récord cuando históricamente era una temporada baja. Todo confluye para que hoy haya 25.000 familias que viven del turismo.
Nuestro pasado andino, la historia y la belleza de los paisajes hacen el destino turístico. Aspiramos a eso siga creciendo. Contamos con 12.500 camas, 700 más que antes de la pandemia que es otro gran logro a pesar del daño. En términos turísticos Jujuy no tiene techo.
– Se habló de un vuelo que conecte Mendoza con Jujuy, sería algo importante la conectividad de una ruta del Oeste argentino. ¿Qué tan probable es eso?
– Le hemos hecho el planteo a la línea de bandera. Pero, como somos provincia de otro color político cuesta un poquito más pero lo cierto es que están dadas las condiciones de mercado para poder crear esta conexión entre Mendoza y Jujuy de manera directa. Hoy hay un vuelo que conecta Mendoza con Salta que nos sirve mucho, pero ni siquiera es de todos los días y nuestra propuesta es que los días que no vuele a Salta, vuele a Jujuy.
Tenemos un aeropuerto nuevo, que es el más grande del Norte y además la demanda crece muchísimo. Cada vez que hay un vuelo a Jujuy supera el 95% de ocupación. Ya estamos volando con Fly Bondi, Jet Smart. Lamentablemente, todavía tenemos un país muy centralizado para viajar durante la semana hay que hacerlo vía Buenos Aires y entonces, bueno ya es hora de empezar a pensar un país distinto.
Hay que cambiar la lógica centralista que tiene la Argentina y tenemos gobernadores que apuntan a eso. En Jujuy, al igual que Mendoza, la lógica fue dejar de pedir y empezar a hacer y a valernos por nosotros mismo, a demostrar que nuestras provincias son viables, que pueden generar recursos y divisas por sí mismos. Y a partir de ahí, generar un polo de desarrollo del país desde adentro hacia afuera y no mirando siempre a Buenos Aires.
Verónica Sato, Secretaria de Vitivinicultura de Jujuy
– Vitivinicultura emergente en Jujuy.
– Es una actividad incipiente que lleva entre 15 a 20 años. Viene con un crecimiento muy importante, por supuesto en una escala mucho mejor que Mendoza. Tenemos la particularidad de tener un clima y una topografía muy extremos lo cual le confiere a los vinos de Jujuy características distintivas. Son vinos de altura y de extrema altura. Tenemos producciones de vinos hasta de 3.700 metros sobre el nivel del mar por cual son muy diferentes, de muy buena calidad pero diferentes y son una alternativa para probar un vino diferente y sobre todo, un vino con un plus, un extra en el lugar de origen. Esa es una gran ventaja que tenemos.
También, tenemos otras zonas vitivinícolas en valles templados que fue una zona vitivinícola a comienzos de siglo XX y luego se transformó en una zona tabacalera y hoy ya las cuartas generaciones vuelven a los orígenes reflotando los viñedos y las bodegas. También pensando en hacer turismo y en dar una oferta enoturística. Nos favorece mucho tener dos zonas muy diferentes climáticas y paisajísticamente con vinos diferentes y particulares.
La vitivinicultura es una actividad que genera mucho turismo, atrae a los pasajeros que disfrutan de la gastronomía, entonces creo que es una actividad que generará mucha mano de obra, ingresos importantes y también una movida importante en el sentido que se va a necesitar mano de obra especializada. Eso le dará un extra a la producción y a los pobladores de Jujuy.
– Si tuvieras que definir los vinos de Jujuy, ¿cómo le contás al consumidor acerca de sus características?
– Puedo decir que son vinos muy intensos ya que tenemos muchísima insolación en la quebrada, lo cual le confiere una particularidad; son vinos muy rojos, oscuros. Y después, tenemos los vinos más frescos de los Valles Templados. Creo que esta zona se va a caracterizar más por las cepas blancas.
– ¿Hay alguna variedad que se vaya perfilando como característica de la zona?
– Casi todos tienen Malbec. Pero creo que hay variedades que se van perfilando con muy buenos resultados. Hay bodegas que tienen Tannat y también Merlot. Van a comenzar a probar nuevas variedades. Desde la Secretaría, vamos a apoyar la producción también haciendo investigación de las cepas que se van perfilando y seleccionar cepas de las que ya tenemos en la zona para empezar a promocionarlas.
– Otro valor agregado es la gastronomía andina que junto al vino ofrece un potencial enorme.
– La gastronomía atrae mucho al turista local como también al extranjero. Y es un gran desafío trabajarlo en forma conjunta. Siempre van de la mano. De hecho ya estamos con un proyecto con Francia haciendo maridajes. Es muy interesante porque el vino no se puede tomar solo, siempre va acompañado de alguna comida. Y la Quebrada de Humahuaca es muy rica en recetas y comidas regionales y en productos andinos como la quínoa, la papa también. Contamos con toda una cuenca en la quebrada con producción de leche y quesos de cabra. Vamos a trabajar muchísimo en ese sentido.
– En esta oportunidad, en el marco de la vendimia, ¿qué esperan llevarse de Mendoza?
– Nuestro principal objetivo era decir, acá estamos. Jujuy presente con nuestros vinos. Creo que lo de hoy fue un gran logro. De Mendoza siempre nos llevamos aparte de la amistad, la experiencia, la calidez y la generosidad de los mendocinos para apoyarnos en el desarrollo de nuestra vitivinicultura provincial.
