El gobernador de San Juan juega su última carta desesperada para intentar permanecer en el poder a pesar de que la Corte Suprema ya puso límites en otros casos similares en el pasado.
Para burlar la normativa electoral anotada de manera precisa en las Constituciones provinciales muchos políticos han intentado ofrecer insólitos y sofísticos argumentos, típicos de abogados con mucha imaginación, que para intentar tomar un atajo en el corpus de la ley sólo muestran ante la opinión pública que “el rey está desnudo” y es vulnerable.
Pues bien, de “esperanza blanca” del peronismo a la presidencia de la Nación, Sergio Uñac, gobernador de San Juan, decidió jugar electoralmente en su pago chico presentando argucias legales que seguramente serán rebatidas en la Corte Suprema de Justicia. Lo hace en el peor momento de su relación con los sanjuaninos y con un PJ dividido ante su intención electoral, porque el plan B que imagina para conservar el poder es muy burdo.
El 12 de diciembre pasado fue publicado en el Boletín Oficial de la provincia el decreto 2091, mediante el cual se convocó a elecciones para la renovación de autoridades provinciales para el domingo 14 de mayo, provocando un desdoblamiento del calendario electoral nacional y traicionando todas las promesas realizadas a Alberto Fernández para no dejarlo solo en su afán reeleccionista.
“Uñac considera perdidas las posibilidades nacionales del Frente de Todos y por ello se recluyó en su provincia burlando la Constitución Provincial”, señaló Andrés González un referente de la oposición. Lo concreto es que el mandatario será candidato para un tercer período a pesar de que fue vicegobernador durante el período 2011-2015 y luego, gobernador, en el 2015-2019 y reelecto para el actual período,2019-2023. Con preocupantes datos, como el de la pobreza que se ubica en un 33,4%, según el INDEC.
Consumado el anuncio del intento de su reelección, la oposición está preparando una presentación judicial que deberá ser resuelta por la Corte Suprema, que en casos similares falló en contra, como en el intento de Gerardo Zamora en Santiago del Estero que sentó jurisprudencia. Por el momento, sólo Gustavo Fernández del partido Dignidad Ciudadana con raíces en la Iglesia Católica, presentó recursos judiciales.
“En San Juan está vigente el artículo 175 de la Constitución Provincial que establece que el gobernador y el vicegobernador duran cuatro años en el ejercicio de sus funciones y pueden ser reelegidos consecutivamente hasta dos veces”, explica el político. El texto tuvo una enmienda de José Luis Gioja, quien había reformado la Constitución provincial agregando un período en el año 2009 para lograr su tercer mandato en 2011.
Desde Juntos por el Cambio sostienen que “la candidatura es contraria a la Constitución porque con su mandato de vice de Gioja y los dos siguientes como gobernador agotó el límite de tres que se fijan en el artículo 175. Si se acepta el argumento que presentó el oficialismo caeríamos en el absurdo de que una sociedad de dos políticos, alternando cargos en períodos diferentes y consecutivos, como gobernador y vice, puedan eternizarse en el poder”.
En el caso de que prosperen los recursos judiciales, la estrategia será parecida a la de Santiago del Estero en la que la candidata terminó siendo Claudia Ledesma Abdala por el freno de la Corte Suprema a su esposo Gerardo Zamora. Siguiendo ese modelo, el plan B para burlar la Constitución provincial será su hermano, Rubén Uñac, actual senador.
Con poco sustento y apoyo de sus votantes y corrido de manera definitiva de la carrera presidencial, el mandatario sanjuanino se desvela por su futuro y el de sus funcionarios. Sus abogados “le tejen la más maravillosa tela que pueda imaginarse” para forzar un nuevo mandato, pero corre el riesgo que hasta los chicos se den cuenta que “no lleva nada” y que sus argumentos son extremadamente forzados.
